“Porque a Cristo el Señor servís”. Colosenses 3:24
Quizás tus oraciones suenen a algo parecido a esto: Señor ¿cuándo
llegará la persona indicada para mí?, ¿Cuándo me unirás él?, Al menos dime ¿quién
es?, ¿Cuánto tiempo más tengo que esperar?, ¿Cómo será? … ¿Te sientes
identificada?
Pareciera que la chica que ora de esta manera está
desesperada por encontrar a un chico pronto, se ha cansado de esperar, parece
que ella sólo puede ver sus circunstancias y le resulta imposible vislumbrar
más allá de lo que iniciar una relación significa.
En el ambiente juvenil y especialmente círculos femeninos,
se respira mucha presión por encontrar un chico que te haga feliz, amada, que
llene sentimientos de soledad y en definitiva que sacie el interior del
corazón. Pero considerar el noviazgo es
algo que no puede ser tomado a la ligera, te has preguntado ¿Cuál es el propósito del amor?
Esta pregunta va más allá de los sentimientos que deseas satisfacer
en el momento, forma parte del cuadro de la voluntad de Dios para tu vida y
para las relaciones de cualquier pareja humana.
Cuando amas a alguien estás dispuesta a hacer muchas cosas
por esa persona. En esto consiste el propósito del amor, en darse a otro sin reservas
esperando nada a cambio, estar dispuesta a servir. Si le quitas todo el encanto
del romance, las flores, y las mariposas en el estómago, darse a un chico para
servirle hasta que la muerte los separe no suena lindo, pero ese es el sentido
de sufrirlo todo, esperarlo todo y soportarlo todo.
Sirves porque amas, y
amas porque sirves.
Si el sentido de amar a un chico a la luz de Cristo es en
definitiva entregarse sin reservas para servirle; ¿Por qué no ejercitar el servicio
desde ahora?
Servir es una oportunidad para
practicar el amor y la misericordia hacia otras personas, qué bueno es poder
extenderse en amor, entrenarte en el servicio a otros te enseña lecciones
valiosas que te preparan para enfrentar un noviazgo de manera más madura.
Piensa en las personas a tu alrededor, ¿Quién necesita conversar?,
¿Quién necesita ayuda?, ¿Quién necesita una sonrisa?, ¿Quién necesita una mano
con las bolsas que carga? Todas esas son formas de servir, y si te das cuenta,
son formas de amar. Estoy segura que todas estas cosas juntas las necesitará un
hombre, entonces tú deberás amarlo y servirlo con todas estas y muchas otras
maneras.
Sirves porque hay amor en tu interior, amas porque hay un deseo de
ayudar en tu interior.
Amando el servicio más que la espera de un chico.
Es cierto que esperar en el balcón al ser amado mientras te
enamoras de la imagen de su llegada suena dulce, pero encierra una trampa:
Pierdes el tiempo, el rumbo y pierdes de vista a Cristo.
¿Amas a Dios? Si lo amas, estás
dispuesta esperar en Su voluntad y no perder el tiempo ni el rumbo, sino más
bien siendo las manos de Dios en la tierra.
“Porque a Cristo el Señor servís”. Colosenses 3:24
Cualquier servicio que hagas a otros será contado como un
acto de amor hacia Dios, porque amas a Dios puedes servir a los que te rodean, y
no te quedarás con las manos vacías, cualquier servicio que hagas será un
entrenamiento para el momento en que llegue esa persona especial.
Qué tal si en vez de esperar a ese chico recostada sobre el
balcón y con la vista perdida en el horizonte, miras hacia la calle de la
esquina y te levantas para ayudar a la
anciana que trata de cruzar la calle, quizás ese sea el inicio de haber
encontrado el verdadero amor.
ACERCA DEL AUTOR
Angélica Jiménez
Hija de Pastores misioneros de nacionalidad Colombiana, ha servido desde los 9 años junto a sus padres en los países de Bolivia y Argentina. Diagnosticada alrededor del año 2009 con Síndrome de Eisenmenger ha propuesto en su corazón servir a Dios hasta el día en que él se lo permita. Sus experiencias en la obra misionera continúan labrando el sueño de brindar herramientas bíblicas para las jóvenes de hoy.
↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝
12 hombres transformados en tres años, cuando conocieron a Jesús y el Espíritu Santo vino sobre ellos su fe creció y su pasión por su Salvador fue encendida. Se convirtieron en hombres que no sólo estaban dispuestos a renunciar a la familia y el hogar, sino que estaban dispuestos a renunciar a sus propias vidas para la gloria de Jesús. Esto no sucedió porque eran más especiales que cualquiera de nosotros. Este es el resultado del poder de Dios en ellos.
Conocer a Jesús te puede transformar, acompáñanos en este estudio de 6 semanas realizando un recorrido por estas vidas extraordinarias, y seamos parte de esta transformación.
Invita a un grupo de amigas, compañeras de estudio, o las jóvenes que lideras y júntense para hacer el estudio por WhatsApp, o de manera presencial. Próximamente tendremos los materiales disponibles para descarga. Comenzaremos el 19 de Junio, ¡te esperamos!
↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝↝
¡Nuestro próximo estudio!
Transformadas
12 hombres transformados en tres años, cuando conocieron a Jesús y el Espíritu Santo vino sobre ellos su fe creció y su pasión por su Salvador fue encendida. Se convirtieron en hombres que no sólo estaban dispuestos a renunciar a la familia y el hogar, sino que estaban dispuestos a renunciar a sus propias vidas para la gloria de Jesús. Esto no sucedió porque eran más especiales que cualquiera de nosotros. Este es el resultado del poder de Dios en ellos.
Conocer a Jesús te puede transformar, acompáñanos en este estudio de 6 semanas realizando un recorrido por estas vidas extraordinarias, y seamos parte de esta transformación.
Invita a un grupo de amigas, compañeras de estudio, o las jóvenes que lideras y júntense para hacer el estudio por WhatsApp, o de manera presencial. Próximamente tendremos los materiales disponibles para descarga. Comenzaremos el 19 de Junio, ¡te esperamos!
Comentarios
Publicar un comentario